Cuatro efectivos policiales fueron destituidos tras ser condenados por vejaciones en el caso Gallardo. Los agentes, previamente absueltos del homicidio culposo, recibieron la sanción máxima administrativa por transgredir deberes fundamentales.
El Ministerio de Seguridad y Justicia, mediante el Decreto N° 706 firmado por el ministro Marcelo Domínguez, formalizó la exoneración del Oficial Auxiliar Ricardo José Antonio Llaves, el Sargento Ayudante Jorge Antonio Olea, el Sargento Ricardo Ezequiel López y el Cabo Lucas Maximiliano Ozuna. La medida fue determinada por la Dirección General de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad tras analizar la conducta de los efectivos durante el procedimiento.
Los policías habían sido absueltos por el beneficio de la duda en la causa por homicidio culposo de Cristian Gallardo, pero recibieron una condena de tres años de prisión condicional por vejaciones calificadas. El decreto ministerial enfatiza que las acciones de los exonerados «resultan especialmente reprochables» al haber violado principios básicos de la función policial.
Los hechos se remontan al 26 de agosto de 2019, cuando los agentes intervinieron en un robo en Finca Independencia. Durante el procedimiento, Gallardo, quien se encontraba oculto en un lavadero con un arma blanca y un teléfono celular robado, se resistió a la detención. Los efectivos aplicaron técnicas de reducción que la fiscalía consideró inadecuadas y excesivas, incluyendo una maniobra de presión en el cuello y golpes en el abdomen.
El desenlace fatal ocurrió cuando Gallardo, tras ser trasladado esposado y boca abajo en la caja de un móvil policial, comenzó a experimentar dificultades respiratorias en la dependencia policial. A pesar de solicitar asistencia médica, cuando llegó la ambulancia, el detenido ya se encontraba sin signos vitales. La investigación posterior determinó que los policías aplicaron un trato riguroso injustificado durante todo el procedimiento.
