Este lunes se conoció que Emilia Orozco aparece en los registros oficiales como una de las que ingresó al penal de Ezeiza para reunirse con genocidas. El viernes, en una entrevista, había asegurado que «hay muchas cosas que no se cuentan de esa parte de la historia». Ayer desmintió vínculos con una maestra que promovía apuestas.
La diputada nacional por Salta, Emilia Orozco, se ve por estas horas envuelta en un escándalo que comenzó el mes pasado y que todavía el gobierno de Javier Milei no logra desactivar: la visita de legisladores libertarios a genocidas condenados por crímenes de lesa humanidad en la cárcel federal de Ezeiza. Este lunes se conoció que Orozco aparece en los registros oficiales del Servicio Penitenciario Federal como una de las personas que ingresó al penal para encontrarse con Alfredo Astiz y el resto de los represores.
A la información la brindó el diario Página 12, que además consultó fuentes de la Cámara de Diputados de la Nación que le aseguraron, sin aportar evidencias, que Orozco se inscribió para asistir al encuentro con los represores pero a último momento decidió no hacerlo.
A la información del matutino se le suma lo difundido este lunes por el canal C5N, que aseguró que Orozco y otros doce legisladores de La Libertad Avanza llevan cuatro meses de reuniones en las que se planificó la visita del mes pasado y también posibles planes para liberar a los represores.
El viernes pasado, antes de que se conocieran los últimos datos sobre su participación, Orozco realizó una defensa de estos movimientos libertarios en los pasillos de los genocidas. En una entrevista en la radio porteña Delta, Orozco dijo que este tipo de actividades forman parte de lineamientos establecidos por su «línea política», y mencionó a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, como una referente.
«Victoria Villarruel siempre ha embanderado la causa en favor de aquellos que están privados de su libertad por causas poco claras», dijo, en relación a los militares detenidos por torturar, violar, secuestrar y asesinar personas, además de atentar contra la democracia.
«Hay muchas cosas que no se cuentan de esa parte de la historia, sin negar y desmerecer todo lo que sucedió y que esperamos que no ocurra nunca más», agregó la salteña en la entrevista.
Ayer lunes Orozco no se mostraba preocupada por las informaciones que se difundían y que la vinculaban a genocidas. Prefirió dedicarse a desmentir su vínculo con la docente salteña detenida por promocionar apuestas ilegales, luego de que trascendiera una foto donde se las puede ver sonrientes a las dos, fundidas en un abrazo.
