Según el abogado Armando Caro Figueroa, representante de la agrupación de Abogados para una Justicia Independiente, es necesario implementar controles más rigurosos y responsabilidad patrimonial, ya que actualmente no se cumplen adecuadamente.
El Consejo de Administración de la Caja de Abogados de Salta ha tomado la decisión de despedir a un cajero tras descubrirse irregularidades en una auditoría. Caro Figueroa reveló que de los 1,4 millones de pesos denunciados, el trabajador contable implicado devolvió 800 mil pesos. Sin embargo, existe preocupación por la falta de fiscalización y el incumplimiento de requisitos formales en la Caja de Abogados, lo que genera riesgos para los afiliados que pagan sus cuotas y aportes.
Si bien algunos abogados se mostraron conformes con las explicaciones brindadas, surgieron críticas por la falta de autocrítica y precisión en las conclusiones de la auditoría. Asimismo, Caro Figueroa hizo hincapié en «la necesidad de una profunda reforma en el sistema de la caja, que estuvo gobernado por un unicato durante los últimos 15 años». Y aclaró luego que «se busca abrir la representación a las generaciones más jóvenes y garantizar que sus ahorros de hoy sean su jubilación de mañana».
Actualmente, una auditoría independiente se encuentra trabajando para detectar posibles casos fraudulentos entre los 1.600 expedientes que presentan maniobras similares a las del cajero desvinculado. Esta situación pone de manifiesto la falta de vigilancia y los sistemas de control defectuosos en la Caja de Abogados. Por ello, el grupo de Abogados para una Justicia Independiente está solicitando una reformulación del sistema de control, para que los afiliados tengan mecanismos similares a los de una compañía de seguros en manos de la caja.
