Quienes se quejan de la coordinadora de Incluir Salud PROFE-Salta se preguntan ahora por la lujosa casa que habita en un country de la ciudad y su rol en una fundación agraciada por un buen subsidio.
Hace un par de semanas se informó de la suspensión de pagos que afectó a 300 pacientes. Salta 12 informó que la asociación de Centros Privados de Diálisis (CEPRIDIASA) suspendió las prestaciones a pacientes de PROFE porque la obra social estatal destinada a las personas con discapacidad les debía alrededor de 100 millones de pesos. Nora Marchetta, secretaria de la comisión directiva de CEPRIDIASA, señaló entonces a Emilce Maury como quien debía pagar a los centros privados por las prestaciones.
«El ministro de Salud provincial, Juan José Esteban debería intervenir», consideró. Fue lo que ocurrió. El 17 de noviembre el sitio oficial del programa publicó que tras labrarse un acta acuerdo suscripta entre el Ministerio de Salud Pública y la Asociación de Centros Privados de Diálisis de Salta (CEPRIDIASA), quedó normalizada la prestación de servicios a los beneficiarios. El ministerio con conduce Juan Esteban desembolso uno 18 millones de pesos.
No obstante, algunos familiares siguen echando espuma por la boca ante las cotidianas complicaciones que encuentran y aventuran hipótesis que explicarían la poca gestión de la funcionaria. Aseguran, por ejemplo, que le presta mayor atención a la Fundación Maury. La cuenta de Twitter de la ONG hace rato que no realiza un posteo, aunque la funcionaria aparece en todas las fotos publicadas. No parece estar yéndolo mal a esa ONG: es una de las treinta organizaciones seleccionadas para recibir fondos salteños dentro de la Convocatoria de Proyectos Socio Productivos. El Gobierno destinará 10 millones con el fin de promover políticas públicas y alianzas que favorezcan el desarrollo local. Si la torta se repartiera de manera pareja, al proyecto “Produciendo para Empoderar” de la Fundación Maury le tocaría la nada despreciable cifra de 333 mil pesos.
Los afectados aseguran también que la titular de Incluir Salud estuvo muy ocupada este año con la construcción de su bucólica casa en San Lorenzo Chico. Se trata de “Praderas de San Lorenzo”: un country que cobija la exquisita vivienda de la funcionaria que así escapa de las impurezas de la ciudad. Los denunciantes aseguran que la construcción terminó de realizarse en estos meses. También se preguntan cuánto dinero debió invertir en esa construcción en plena pandemia y si el sueldo. Tener una idea de esto último no es tan difícil. Una consulta a inmobiliaria de la ciudad asegura que una vivienda de ese tipo se vende a un precio que ronda los 240 mil dólares: es decir $34.800.000.