Hoy tiene 26. Fue condenado por la Justicia luego de reincidir en delitos. Su hermana y su madre lo denunciaron.
El drama de las adicciones tuvo un nuevo capítulo en las últimas horas. Seguramente pasará al olvido rápidamente, pero funciona como un ejemplo perfecto de la degradación que produce en las personas. Muestra que la diferencia entre la delincuencia y la enfermedad se diluye.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, un hombre de 26 años de nuestra ciudad fue condenado a un año de prisión por violación de domicilio e incumplimiento de medidas cautelares.
La fiscal penal de Violencia Familiar y de Género 2, Mónica Viazzi, representó al Ministerio Público Fiscal ante el Juzgado de Garantías 2 del distrito Centro, en la audiencia de juicio abreviado contra el hombre por los delitos de violación de domicilio y desobediencia judicial en concurso real.
El pasado 30 de diciembre de 2024, la madre del condenado lo había denunciado. Aseguraba que en la madrugada de ese día, su hijo había ingresado a su casa sin autorización y le robó elementos para luego venderlos y comprar las sustancias que consume desde los once años.
La mujer manifestó, además, que el acusado tiene vigentes medidas cautelares, como la exclusión de hogar y prohibición de acercamiento a 300 metros, por una denuncia anterior, por parte de su hija, hermana del condenado.
El juez Ignacio Colombo, luego de recibir la confesión del acusado, lo condenó a la pena de un año de prisión de ejecución efectiva y lo declaró reincidente por primera vez.