Fueron sentenciados a un año de prisión condicional y doble tiempo de inhabilitación por incumplimiento de deberes de funcionario público y estelionato. El caso fue descubierto gracias a una conversación entre efectivos que alertó sobre la irregularidad.
Un comisario de 43 años y un sargento de 50 fueron condenados como coautores de los delitos de incumplimiento de deberes de funcionario público y estelionato en concurso real, tras comprobarse que vendieron ilegalmente un autoelevador de carga marca Sampi que se encontraba secuestrado en su dependencia policial. La pena impuesta incluye un año de prisión de ejecución condicional, inhabilitación especial por el doble de tiempo y el pago de una multa.
La investigación se inició cuando un oficial escuchó una conversación entre dos efectivos que mencionaban la venta del autoelevador, cuya ganancia supuestamente estaría destinada a la dependencia, aunque el dinero nunca ingresó. Al indagar sobre el caso, se descubrió que los condenados habían vendido el vehículo a los propietarios de una cajonera ubicada en la misma localidad.
El juez Mario Maldonado, de la Sala I del Tribunal de Juicio de Orán, estableció además que los condenados deberán cumplir reglas de conducta durante dos años. En caso de incumplimiento, se podría revocar la condicionalidad de la pena, pasando a ser de cumplimiento efectivo.
El estelionato, explicaron desde el Poder Judicial de Salta, es uno de los delitos por los que fueron condenados estos uniformados y consiste en vender o gravar falsamente bienes ajenos o propios, lo que en este caso se configuró al comercializar un bien que se encontraba bajo custodia judicial y no era de su propiedad.
