El gobernador dio un reportaje al diario La Nación en donde aseguró que Macri no lograr generar confianza porque no sabe explicar ni la situación actual ni las metas que posee. Volvió a reclamar que parte del ajuste se haga con recaudación.
“El problema es que el gobierno subestimó la magnitud de la crisis”, es el titulo del reportaje que la periodista Lucrecia Bullrich publicó en la edición de hoy del diario La Nación. Allí el gobernador salteño se refirió ampliamente al terremoto económico que se dio en la semana, la forma en que imagina la relación provincias – nación para salir de la crisis mientras evitaba hablar de candidatura en el actual contexto.
“¿Cómo evalúa el manejo de la crisis por parte del gobierno nacional?”, fue la pregunta que inauguró la entrevista. “Mi sensación es que el gobierno subestimó el nivel de volatilidad y de debilidad que tenemos. No se tomó el peso de la falta de confianza en la Argentina que todavía existe. No se toma conciencia de que la falta de confianza no es algo que se pueda rebatir con un discurso. Eso necesita acciones concretas”.
Puntualmente ¿qué falló?
Es que no se falló esta semana. Lo que falló es que Argentina no ha dado señales de confianza. Si hay inestabilidad o inseguridad respecto de que la Argentina pueda cumplir sus compromisos, inevitablemente pasa esto. El tema no es de hoy. Hoy es el día que te rebotaron los cheques, pero esto es consecuencia de no haber generado certidumbres.
¿Por qué no logra Macri transmitir confianza? ¿En qué falla?
Demostrar con claridad a la sociedad y a los mercados que Argentina está en condiciones de cumplir. Mostrar cuál es la situación, cuáles son los compromisos de acá a 16 meses, cuáles son las previsiones, cuál es el horizonte en términos de reducir el déficit fiscal y la posibilidad de cumplirla. Porque la reducción del déficit fiscal es una condición necesaria pero no suficiente. La Argentina tiene que demostrar que puede cumplir sus compromisos.
¿Por qué cree que el gobierno no dio explicaciones claras?
Porque ha subestimado la magnitud de la crisis. El hecho de negar que tenemos una crisis es lo primero que demuestra que se la subestimó.
¿Un cambio de gabinete sería una buena señal?
No creo que las personas sean tan importantes como para generar confianza en la Argentina.
El gobierno dejó trascender que el ajuste requerirá $100.000 millones adicionales. ¿Se lo comunicaron a los gobernadores?
Yo no tuve ninguna información formal. El problema del gobierno es que muchas veces cree que los problemas de economía ser arreglan con rumores de prensa. Hasta ahora, las únicas que han hecho un esfuerzo fiscal han sido las provincias que, por ejemplo, ya no tienen más fondo sojero.
¿Se puede hacer un ajuste superior al que está previsto?
Lo que pasa es que el papel soporta cualquier cosa. Después hay que ver si eso es viable. Hasta ahora he visto una mayor predisposición para ver cómo ajustan las provincias y no qué esfuerzo hace la nación. Lo primero que necesitamos saber es, concretamente, qué es lo que el gobierno plantea concretamente en términos de reducción.
¿Cuáles serían las alternativas viables?
Hay que ampliar la base imponible. No subir impuestos sino rediscutir los niveles de elusión fiscal, a ver si podemos mejorar la recaudación.
¿Van a aceptar un recorte mayor?
No puedo opinar sobre abstracto. Sería una irresponsabilidad. Sí puedo decir que sólo vamos a ir hasta lo que sea socialmente aceptable.
¿Cuál sería ese límite?
Hay que ver con lápiz y papel cada partida del presupuesto. Además, el límite de la reducción está ordenado por la sustentabilidad de un modelo político. Además del déficit, tenemos que trabajar en cómo mejorar la balanza comercial y cómo hacemos más competitivos los sectores productivos.
¿Por qué cree que el gobierno no convocó a los gobernadores?
Deben estar preparando la propuesta sobre lo que quiere que discutamos. Porque en teoría estamos todos dispuestos a colaborar para que lleguemos a consensos, pero tenés que discutir sobre un proyecto concreto. Como dije, creo que se subestimó el volumen de la crisis.
El gobierno dice que el acuerdo por el presupuesto “está muy avanzado”. ¿Comparte ese diagnóstico?
Hay voluntad de acordar. Pero todavía no estamos hablando ni de qué porcentaje vamos a bajar ni en qué ítems lo vamos a hacer. Pero hay voluntad de diálogo.
Entonces el acuerdo no está tan avanzado ¿Es optimista como Frigerio?
Soy optimista pero soy consciente de lo que es una negociación. El presupuesto no va a ser ni el cien por ciento de lo que queremos nosotros ni el cien por ciento de lo que quiere el gobierno.
¿Va a ir a la reunión de gobenadores el martes en el CFI?
Nadie me dijo nada.
¿Y si lo convocan?
Imposible. Salvo algo de gravedad extrema, tengo agenda completa en la provincia.
¿Le incomoda que convoquen a los gobernadores más duros?
No, para nada. Primero nadie me convocó. Y segundo, tengo que laburar en la provincia.
¿El peronismo va a seguir esperando para definir candidato?
Creo que sí. En esta volatilidad y en esta crisis me parece que discutir candidaturas es ciencia ficción. De mínima es desatinado.
Hay gobernadores y dirigentes que creen lo contrario: que hay que mostrar una altenativa a Cambiemos cuanto antes.
La elección es dentro de 14 meses. La gente tiene un nivel de hartazgo tan grande con el sistema político que si creemos que esto se resuelve con más política electoral no estamos escuchando a la gente.
