La gestión ante nación para habilitar el turismo interno fue anunciada por el gobernador Sáenz. Una seguidilla de feriados largos en junio y julio resultan ideales, aunque en las intendencias hay temores que pesan.
Fue uno de los anuncios destacados del informe de situación que realizara el gobernador en la noche de ayer. Se produjo luego de una reunión que el mandatario mantuvo en la semana con representantes de la Cámara de Turismo que demandaron lo obvio: reactivar el sector cuya actividad es nula desde hace 70 días, salvo para los hoteles que se utilizan para las cuarentenas de los reingresados.
El anuncio del gobernador se realiza también semanas antes de que ciertos feriados se conviertan en los momentos propicios para que las familias se tomen unos días de descanso por los dos fines de semanas largos de junio y julio. El lunes 15 de junio se trasladó el aniversario de la muerte de Martín Miguel de Güemes a nivel nacional, mientras el miércoles 17 será el feriado provincial por el héroe gaucho. En tanto, el jueves 9 de julio es feriado por el aniversario de la Independencia y el viernes 10 se decretó día no laborable puente.
No obstante, la forma en que muchos funcionarios y medios trataron el tema de los repatriados hasta no hace mucho tiempo también empieza a pasar factura a la hora de querer habilitar el turismo interno. Lo resaltaron los propios hoteleros que se reunieron con el gobernador la semana pasada al señalar que uno de los desafíos es lograr la aceptación de los habitantes locales a recibir turistas, aunque sean salteños, y citaban como antecedentes los temores que generan en la comunidad los que vuelven a sus pueblos desde otro punto del país.
En ese sentido, el ministro de Gobierno, Ricardo Villada, también habló con los medios e informó que hablaron con todos los intendentes salteños, muchos de los cuales aún estaban reticentes a la apertura del turismo, pero que se quedaron tranquilos cuando el Gobierno Provincial les aseguró que habrá un fuerte control sanitario.
