Las paritarias todavía son una incógnita para los mandatarios municipales de la provincia. «No sabemos ni qué va a pasar mañana», dijo Diego Sumbay, de La Caldera.
Los intendentes son rehenes de la incertidumbre que transmite el gobierno de Javier Milei. Mientras el presidente se pelea con cualquiera que no haga lo que él quiere, en las pequeñas localidades no saben qué pasará y con qué recursos contarán. Justo antes del inicio de las paritarias.
En Nuevo Diario, los intendentes salteños reconocieron que deberán enfrentar paritarias con menos recursos y baja recaudación.
Daniel Moreno, presidente del Foro de Intendentes e intendente de Vaqueros, dijo que «hay un común acuerdo entre los intendentes» de en qué áreas aplicar recortes o ajustes ante el contexto nacional. Sostuvo que la ayuda social es algo que deberá mantenerse con mayor firmeza.
«Uno va a priorizar la vida, no pagar impuesto. Vas a priorizar comer, antes que pagar impuestos. Y esto va a ser así, vamos a tener menos recaudación, seguro, porque pasa por ahí también», dijo.
«Salta todavía no salió a decir nada porque todavía no sabemos cómo hacer. No sabemos ni que va a pasar mañana, como está todo tan inestable», sostuvo Moreno sobre las paritarias que se vienen.
Diego Sumbay, intendente de La Caldera, dijo que continuarán trabajando «con total responsabilidad y austeridad». «Somos responsables a la hora de administrar los recursos que son limitados, hemos podido cumplir con cada una de las paritarias con los empleados municipales, porque también entendemos que el empleado también necesita comprar alimentos, necesita mandar a los chicos a la escuela, necesita hacer las compras ahora que se vienen las clases, y el municipio hace un esfuerzo enorme para poder cumplir con la paritaria. Por el momento estamos cumpliendo con todo lo que está establecido», dijo.
