Los deslaves, producto de las intensas lluvias, han dejado varios camiones varados y alertan sobre riesgos inminentes en la zona. Autoridades y transportistas piden extremar precauciones.
La Ruta Nacional 51 enfrenta graves complicaciones debido a los derrumbes y deslaves provocados por las intensas lluvias registradas en las últimas jornadas. Varios camiones han quedado varados en distintos tramos de la traza, mientras las autoridades advierten que la ruta, aunque transitable, requiere extremar las precauciones. El río Blanco arrastró una gran cantidad de sedimento, lo que agravó la situación.
Según informes de Radio Salta, las precipitaciones en las altas cumbres han sido particularmente intensas, lo que ha generado deslizamientos en los sectores medios y bajos de la precordillera. Barrera alertó sobre el peligro inminente de nuevos derrumbes, especialmente en la zona del puente del río Blanco, cerca de Campo Quijano, un área frecuentada por turistas. Además, destacó los riesgos que enfrentan los transportistas de empresas mineras, quienes, pese a las adversidades, intentan cumplir con sus compromisos laborales.
El periodista recordó el trágico suceso ocurrido en 2010, cuando un camionero perdió la vida al ser sepultado por un deslave en la antigua traza de la Ruta Nacional 51. Carlos Alberto Medina, de 51 años y empleado de la empresa de transporte Marcilese, falleció mientras transportaba salmuera. Su cuerpo fue hallado días después del incidente, ocurrido en el paraje Río Blanco, a pocos kilómetros de Campo Quijano. En su memoria, la familia colocó una pequeña gruta en el lugar del accidente.
