Es una de las medidas que se acordó en la Mesa del Agua que se concretó ayer y de la que participó el presidente de la empresa: Luis María García Salado. También resolvieron pedir la emergencia hídrica para recibir fondos del gobierno.
La única solución de corto plazo que se resolvió ayer dejó en claro lo mal que están las cosas en la provincia para garantizar el servicio del agua. Nadie hablo de obras que resuelvan las falencias evidentes, sólo de pedir al Ministerio de Economía la contratación de 15 camiones cisternas que se sumarán a los 51 ya existentes y que están en circulación en toda la provincia.
Fue una de las propuestas consensuadas en la Mesa del Agua convocada por el Ente Regulador de los Servicios Públicos (Enresp) y de la que participaron legisladores, intendentes y el presidente de la empresa Luis María García Salado que se mostró a favor que se declare la emergencia hídrica en Salta. “Con ello se va a posibilitar que junto a todos los organismos de Estado, podamos resolver de forma inmediata las problemáticas que se vayan presentando” declaró, para luego precisar que con tal declaración se dejará de lado la burocratización ante cada pedido que se presenta y se pueda «actuar más rápido».
Con respecto a la contratación de 15 nuevos camiones aguateros que se sumarán a los 51 que ya están en funcionamiento, se acordó que los mismos sean costeados por el ministerio de Economía y que se deriven a las zonas más críticas: Tartagal, General Mosconi y Orán.
Al ser consultado por las manifestaciones de vecinos en Capital, Tartagal, Rosario de la Frontera, General Güemes y Orán aseguró que ello evidencia la realidad del servicio. «Me solidarizo, pero por más que hoy me hagan una manifestación, no les soluciono hoy el tema» porque «no tengo la varita mágica para decir que abro una canilla y sale agua», expresó.
