Un fallo reconoce que la crianza de los hijos demanda tiempo y esfuerzo, por lo que debe tener asignado un valor económico.
Una madre reclamó a su expareja el 60 por ciento de un salario mínimo, vital y móvil para la manutención de los tres hijos que tienen en común. En última instancia, dos jueces fallaron a favor determinando que la tarea del cuidado de los niños tiene un valor económico en tanto se invierte tiempo y esfuerzo.
La mujer interpuso la demanda con el patrocinio oficial de Sylvina María Carrer. El juez de Personas y Familia de sexta nominación, Daniel Juan Canavosso, determinó inicialmente que el padre debía pasar una cuota equivalente al 30% del SMM hasta tanto se resolviera la cuestión de fondo.
En su sentencia el magistrado consideró que “debe valorarse al momento de fijarse el monto de la cuota alimentaria el tiempo que el progenitor que tiene la custodia o cuidado personal de los hijos emplea en la misma, por cuanto se le debe asignar un valor económico, pues no cabe duda que la crianza de los hijos demanda tiempo y esfuerzo”.
Sin embargo, Carrer apeló la decisión por considerar que el 36 por ciento y una cuota supletoria a pagar en 20 tramos mensuales no era reparadora ya que se priorizaba las condiciones económicas del padre por sobre el derecho de sus hijos.
El caso lo resolvió la Sala Tercera de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial. Los jueces María Inés Casey y Marcelo Ramón Domínguez revocaron la sentencia de Canavoso y estipularon que el demandado debe abonar el 60 por ciento de un Salario Mínimo, Vital y Móvil, a razón de un 20% por cada hijo.
