Entre una deuda millonaria de nación que planean convertir en “obras” y el ascenso de más de 600 oficiales del Servicio Penitenciario, los presos se acumulan en las cárceles salteñas.
A raíz del reciente episodio en una comisaría de Mosconi, en el que presos denunciaron las condiciones inhumanas en las que son retenidos, los medios retomaron en agenda el tema carcelario en la provincia.
Pablo Alavila, secretario de Políticas Penales de Salta, habló por Aries, ahí constató lo que se sospecha: el hacinamiento en las cárceles es una realidad. “Tuvimos un 2018 realmente complejo, con algunas unidades en la provincia con una superpoblación importante”, dijo Alavila, además reconoció que se “está trabajando por encima de la capacidad”.
También el secretario aseguró que existe una deuda que mantiene Nación para con la provincia de Salta. Son 200 millones de pesos por los presos federales: “Estamos proponiendo que la financiación sea en concepto de obras”.
En la misma línea de obras, el funcionario adelantó que para este año tienen prevista la construcción de un pabellón nuevo en Villa Las Rosas y otro en la ciudad de Tartagal.
