Un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA) indica que el consumo per capita fue de 47 kilos anuales para el período enero-octubre de 2024. Es el más bajo de los últimos 28 años.
El promedio refleja una caída del 11,2% en comparación con el mismo lapso del año anterior. La cifra sitúa el consumo de carne vacuna muy por debajo de los niveles históricos.
La situación no es distinta en Salta. Hace un par de semanas el empresario cárnico Dardo Romano aseguró que en nuestra provincia hubo una caída de ventas de alrededor del 25 por ciento. «Si hacemos una comparación con el año pasado me parece que estamos por lo menos un 10 por ciento abajo según las estimaciones que tengo en la carnicería», dijo.
Todo eso se da en un marco en donde la producción y las exportaciones crecen. Con respeto a lo primero, el informe indica que la industria frigorífica aumento la producción en octubre de 2024 alcanzando las 290.000 toneladas de res con hueso. Este dato representó un repunte en la faena que ascendió a 1,27 millones de cabezas, el nivel más alto en quince meses.
“Mientras el consumo interno se encuentra en retroceso, las exportaciones de carne vacuna marcaron cifras récord. Durante los primeros diez meses de 2024, las exportaciones ascendieron a 784.000 toneladas res con hueso, un aumento interanual del 12%.”.
Las cifras son claras: lo que dejan de comer los argentinos se exporta para beneficio de los frigoríficos. En la crisis de los argentinos está inscripto el triunfo de los millonarios.
