Medios patagónicos calificaron como “nutrida” a marcha de ayer frente a la comisaría de Puerto Deseado. El comisario informó a los manifestantes sobre el estado de las investigaciones.
Los vecinos reclamaron justicia por el brutal ataque contra la mujer oriunda de Rosario de la Frontera que fue violada y sufrió el asesinato de su hijo de cuatro años en la zona costera de esa ciudad de Santa Cruz. En la ciudad donde se produjeron los hechos, decenas de vecinos marcharon desde el cruce de las calles Almirante Brown y San Martín hasta la puerta de la comisaría para exigir explicaciones por la falta de seguridad.
Tras algunos minutos de tensión en la puerta de la dependencia policial, un grupo de vecinos ingresó al lugar para exigir ser recibidos por las autoridades. El comisario habló ante las personas presentes y los medios de comunicación y reiteró que son dos los detenidos por lo sucedido y aclaró que quedaron en manos de la Justicia, quien deberá llevar a cabo las pruebas y los procedimientos correspondientes.
El funcionario aseguró además que la autopsia al cadáver del niño determinó que falleció como consecuencia de «múltiples traumatismos de cráneo provocados con un elemento contundente», y negó que haya sido arrojado por un acantilado.
