Un hombre de 32 años fue sentenciado a una pena de siete años de prisión efectiva por delitos de abuso sexual, desobediencia judicial y daños. La decisión fue tomada por la jueza María Laura Toledo Zamora del Tribunal de Juicio de Orán.
En un fallo contundente, un individuo de 32 años fue hallado culpable de cometer actos repudiables que incluyen abuso sexual con acceso carnal continuado, desobediencia judicial y daños, en concurso real. La jueza María Laura Toledo Zamora, perteneciente a la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, dictaminó una sentencia de siete años de prisión efectiva para el acusado.
Además de la pena privativa de libertad, se ordenó la extracción de muestras de ADN del condenado para su inscripción en el Banco de Datos Genéticos. Asimismo, deberá someterse a tratamiento psicológico por el tiempo que determine el profesional a cargo, como parte de las medidas impuestas. En el mismo fallo, el hombre fue absuelto del delito de privación ilegítima de la libertad agravado, tras aplicarse el beneficio de la duda.
Según el relato de su expareja, el acusado había sido denunciado en reiteradas ocasiones por violencia de género, incluso cumpliendo una condena previa. Ella afirmó que, después de salir de prisión, el hombre la hostigó verbalmente, la agredió físicamente, amenazó con dañar a su hija y la obligó a mantener relaciones sexuales en múltiples oportunidades, lo que derivó en la denuncia presentada el 7 de julio de 2022. En un incidente posterior, ocurrido el 20 de diciembre del mismo año, el acusado volvió a amenazarla, la golpeó y la forzó a tener relaciones nuevamente, hasta que finalmente fue detenido tras solicitar ayuda a las autoridades.
