Un inquietante suceso sacude a la comunidad guaraní de Piquirenda, ubicada en la ruta nacional 34 entre Tartagal y Aguaray. Camionetas sin matrícula y vidrios polarizados ingresaron al poblado, pero la rápida reacción de los adultos evitó el secuestro.
Un escalofriante episodio ocurrió ayer en la comunidad guaraní de Piquirenda, donde se registró un intento de secuestro de niños. Según la denuncia presentada por los propios familiares de los pequeños, varias camionetas de lujo, sin placas de matrícula y vidrios polarizados, irrumpieron en el poblado alrededor de las 17.30 horas.
De acuerdo con los relatos de los niños involucrados, una mujer descendió de uno de los vehículos y se acercó a los pequeños que jugaban en las calles. Luego de entregarles dinero, tomó de la mano a uno de los niños de 5 años e intentó subirlo a la camioneta. Sin embargo, la resistencia del niño y sus lágrimas alertaron a los adultos de la comunidad, provocando la rápida huida de los vehículos.
Las autoridades oficiales actuaron con premura ante el incidente. La policía se presentó en la comunidad poco después del alerta emitido a través del Sistema de Emergencias 911. El padre del niño que fue objetivo del intento de secuestro fue trasladado para presentar la denuncia formal en la comisaría más cercana. A pesar de que la revisión de las cámaras de vigilancia no confirmó la presencia de las camionetas en el lugar, la comunidad sigue en estado de alerta tras este aterrador incidente.