El Ejecutivo redujo los topes de ingresos individuales y familiares para percibir beneficios como la Asignación por Hijo. La medida afecta a miles de trabajadores formales.
En una controvertida decisión, el Gobierno nacional redujo este lunes los límites de ingresos para acceder a las asignaciones familiares, destinadas a trabajadores formales. Mediante el Decreto 194/2024, publicado en el Boletín Oficial, el Ejecutivo bajó de $1.980.000 a $1.077.403 el tope de ingresos a nivel individual y de $3.960.000 a $2.154.806 el máximo ingreso familiar, equivalente al doble del individual.
Esta medida, calificada como «de carácter urgente para superar la situación de emergencia» que atraviesa el país, limita significativamente el universo de potenciales beneficiarios de prestaciones como el salario familiar por hijo, la asignación prenatal, por adopción y la ayuda escolar anual, entre otras.
El drástico recorte de ingresos máximos revierte una decisión tomada en marzo de 2022 por la anterior administración, que había igualado el tope para percibir asignaciones familiares al mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. Aquella medida incorporó a unos 900.000 niños y adolescentes al Sistema Único de Asignaciones Familiares (SUAF).
Ahora, el gobierno encabezado por Javier Milei justificó el nuevo decreto, alegando que busca «implementar una equitativa distribución de los recursos sobre la base del principio cardinal de solidaridad social». Asimismo, citaron la emergencia pública vigente sosteniendo que la cobertura del sistema de seguridad social debe «alcanzar a la población para la cual se diseñaron las políticas públicas», actualizando las decisiones «a la realidad imperante» y la «sustentabilidad del régimen».
