El diputado nacional repudió de inmediato el atentado contra Cristina, pero fue muy crítico con algunas reacciones del oficialismo. Pidió que se acaben los ataques de odio.
El ataque a Cristina Fernández de Kirchner fue la consecuencia de una escalada de años en la política y la sociedad argentina. Pero el atentado frustrado no terminó con las grietas. Las repercusiones inmediatas y las que siguen surgiendo sugieren que esas disputas están lejos de acabarese a pesar del momento que vivimos el jueves.
Pero hay un salteño que pide que eso se acabe. Y lo advierte: de continuar, todo podría ser peor. Es el diputado nacional Carlos Zapata, miembro de Ahora Patria, el partido de Alfredo Olmedo, aliado de Juntos por el Cambio.
Zapata emitió un comunicado inmediatamente después del atentado fallido. Fue una de las primeras reacciones de la política salteña y, podríamos arriesgar, nacional.
«Yo estaba estupefacto con lo que pasó, por eso con Olmedo consensuamos un comunicado para repudiar esto porque es una barbaridad», dijo Zapata.
Sin embargo, esa conmoción inicial generalizada pronto derivó en un estado más relacionado con la dinámica anterior. La de la confrontación y la falta de acuerdo. Para Zapata, esto puede ser aún más peligroso.
«Esto no puede volver a suceder. Lo que pasaba en los años 70, esa violencia, tuvo inicio en la política», dijo Zapata.
En FM Pacífico, el legislador señaló que «hay que acabar con el privilegio de tener privilegios». «Quien está mandado a buscar el bien común por el voto popular no puede tener privilegios», detalló.
