domingo 28 de abril de 2024
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Gasoducto GNEA | Se reinicia la obra que sufrió el robo de 35 kilómetros de caños que involucra al ex intendente salteño de Aguaray

Las obras habían sido suspendidas en el macrismo en el año 2018. En 2020 se hizo tristemente célebre por el robo que termino con la imputación del ex intendente Jorge Prado y la intervención de ese municipio.  

La obra se inicia en la frontera con Bolivia y atraviesa territorio salteño para permitir conectar la red natural de gas a 378.000 hogares de Formosa, Chaco y el norte de Santa Fe. Cuando el gobierno de Mauricio Macri suspendió la obra, el tramo salteño ya estaba finalizado. Durante el parate de más de un año, ocurrió el escandaloso robo de los caños que terminó con la expulsión de ex intendente de Aguaray que autorizó desenterrar los caños y ponerlos a disposición de una firma mendocina.

Entre ayer y hoy, la obra volvió a ser una “buena” noticia. La Empresa Integración Energética (IEASA), dependiente del Ministerio de Economía, decidió el reiniciar los trabajos, al levantar la suspensión que recaía sobre la misma desde 2018, lo que permitirá culminar el proyecto para beneficiar a 378.000 hogares del litoral.

Fuentes de la empresa informaron al diario Ámbito Financiero que, tras el trabajo de análisis realizado por las áreas técnicas específicas, el directorio de la ex Enarsa tomó la decisió. “La obra es un histórico y legítimo reclamo de las provincias del Noreste Argentino y su reinicio representa la decisión política del Estado en terminar una obra que permitirá brindarle el servicio de gas natural a toda una región postergada», explicaron.

La actual gestión de la empresa entendió que «los supuestos impedimentos técnicos eran falsos argumentos esgrimidos para ocultar una decisión política de una gestión que siempre se expresó en forma adversa hacia esta obra, a la cual consideraba como gasto irrecuperable y no como una inversión para poner en valor al Noreste». IEASA señaló que para una etapa posterior, «se trabajará en alternativas para incorporar a los 350.000 hogares de las provincias de Misiones y Corrientes los cuales, por una decisión política de 2017, fueron excluidas del Gasoducto del Noreste Argentino».

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