Se trata de una decisión de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación que venía siendo impulsada desde hace años por familiares de personas detenidas y desaparecidas por la dictadura militar en la provincia.
La señalización se acordó con la municipalidad de Salta y se realizará con un acto a las 10.30 del lunes 18 de octubre. Del mismo participaran autoridades del gobierno nacional encabezadas por el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla, y el presidente del Consejo Federal de Derechos Humanos, Agustín Di Toffino.
La existencia de esta fosa común era conocida desde los tiempos de la dictadura. En 1977, Julio Gamboa encontró en ese lugar el maxilar y restos de pelos de su cuñada, Gemma Fernández Arcieri de Gamboa, secuestrada y desaparecida el 24 de septiembre de 1976 junto a su marido, Domingo “Guilo” Gamboa. “Manuel Costello era el dentista de Gemma y Julio recurrió a él para que comparara el maxilar encontrado en la fosa con su ficha dental, así confirmó que estaba frente a huesos de su cuñada” reseñó en su edición de hoy la sección local del diario Página 12.
No fueron los únicos testigos que dieron cuenta de la existencia de este enterratorio común que usaba el Ejército para arrojar los cuerpos de sus víctimas. Según los mismos, el enterratorio estaba ubicado en el fondo del predio del Cementerio. Rubén Américo Melina – empleado del cementerio en la década del 70 – testimonió que una noche vio cómo tres camiones Unimog del Ejército descargaron cajones que él con sus compañeros debieron enterrarlos en la fosa abierta en el noroeste de la parte trasera del panteón del Centro Argentino.
Silvano Benancio Gutiérrez, también empleado, describió que la fosa era una zanja donde colocaron los cajones en fila, a un metro y medio de profundidad. “Incluso escuchó al administrador de ese entonces del Cementerio decir que era cuerpos de personas que habían participado en la lucha subversiva en Tucumán”, resaltó el medio citado.
En 2015 se hizo una excavación en una parte, pero se determinó que ahí solo había tumbas individuales. En 1984 se había excavado en el Sector C, y se encontraron monedas de 1975.
El pasado 7 de octubre el Juzgado amplió la medida de no innovar dictada en 2020 para alcanzar también a otra parte del cementerio que consideró de interés someter a inspecciones en busca de restos humanos. Sin embargo, en la ampliación el juez recordó que esta medida “quedará sujeta a que las partes en este proceso delimiten la superficie –con el debido fundamento- toda vez que hasta el momento no se efectuó una medición que indique con precisión las dimensiones que presenta”.