En un operativo digno de una película de acción, la policía salteña logró rescatar cajones de la codiciada bebida fermentada, aunque ya estaban vacíos. ¡El crimen no paga, salvo que sea por unas birras!
El departamento de prensa de la Policía de Salta nos brinda nuevamente una noticia de vital importancia: esta vez un caso que seguramente mantendrá a la población al borde de sus asientos. En un despliegue policial de proporciones épicas, los valientes oficiales del Operativo Barrio Seguro lograron recuperar uno de los tesoros más preciados de la humanidad: ¡cajones de cerveza!
La escena se desarrolló en la zona Este de Salta Capital, más precisamente en Villa Mitre, donde los agentes acudieron con luces y sirenas al llamado de un ciudadano consternado por el robo de sus cajones con envases que no se detalló si contenían o no el líquido burbujeante. ¿Acaso no hay crimen más atroz que arrebatar las delicias de la fermentación a un sediento bebedor?
Los oficiales, con su reconocida astucia detectivesca, dieron rápidamente con el sospechoso, un individuo que transportaba descaradamente dos de los codiciados cajones. En un giro inesperado, el delincuente intentó escapar, pero los héroes vestidos de azul lograron someterlo en una persecución digna de las mejores películas policiales.
Pero la historia no termina ahí, queridos lectores. En un golpe maestro de investigación, los uniformados descubrieron otros cuatro cajones escondidos en la guarida secreta del criminal. ¡Toda una hazaña de proporciones titánicas!
El sospechoso, de la tierna edad de 24 años, fue entregado a las garras de la justicia para enfrentar el peso de la ley por su osadía de privar a un ciudadano de su preciado néctar. Esperemos que esta lección sirva de advertencia a todo aquel que ose interponer entre un salteño y su cerveza fría.
