La modelo y actriz que había denunciado redes de trata en las altas esferas mediáticas, falleció hoy rodeada de un halo de incertidumbres. El año pasado, en las redes sociales, vaticinaba que algo así podía suceder.
Sin duda la noticia que copa los portales de todo el país es el fallecimiento de Natacha Jaitt. La actriz, empresaria, modelo e incluso autoproclamada “prostituta VIP”. El año pasado hizo saltar a más de uno con sus declaraciones.
Cuando salieron a la luz los casos de abusos y corrupción de menores en las inferiores del club Independiente, ella brindó más detalles de los implicados del delito de Trata y Pedofilia, poderosos políticos, conductores de TV y la farándula porteña quedaron implicados tras las declaraciones de Jaitt. Por supuesto eso luego se perdió en el limbo. No se habló más.
Posteriormente denunció que había sido violada, los autores eran cercanos a ella. Sin importarle eso los denunció públicamente. Así como públicamente auguró un posible dudoso final de su vida. En abril de 2018, en un tuit que ahora está siendo difundido en todas partes, ella aseguraba que de una manera atroz, la iba a hacer responsable de su propia muerte.
La autopsia de la mujer de 41, hallada muerta en “un salón de fiestas situado en el barrio La Ñata, partido de Tigre”, según Infobae. El cuerpo sin vida fue encontrado tendido en una cama en el Complejo Xanadú.
El mismo medio también indica que de acuerdo con un examen preliminar realizado por el médico de la Policía Bonaerense en el salón de fiestas, el cuerpo de Natacha no presenta signos de violencia externos y su muerte «habría sido producida por la ingesta de alcohol y cocaína».