Vecinos de barrio Las Colinas denuncian una grave situación de escasez de agua que se prolonga por semanas. El camión cisterna enviado para abastecer a la comunidad llegó con problemas y chocó contra una vivienda. Los afectados claman por soluciones mientras Aguas del Norte admite demoras en su atención debido a fallas en el sistema.
La angustiosa falta de suministro de agua afecta a los residentes de barrio Las Colinas -una vez más- desde hace dos semanas, generando condiciones de vida precarias. A pesar de las promesas de solución por parte de Aguas del Norte, el camión cisterna que debía abastecer de agua a la comunidad arribó en condiciones lamentables, quedándose sin frenos y colisionando con una vivienda.
Gloria Barrera, una vecina afectada, compartió su desesperación ante la crítica situación. «Nos tenemos que conformar con que el camión suba una vez a la semana y nos dejen uno o dos tachos, y con eso hay que aguantar. Pero no vino más el camión, llamamos a Aguas del Norte y nos dicen que ya va, pero no llega», relató Barrera a Nuevo Diario. Esta realidad golpea especialmente a los hogares con niños y a aquellos que enfrentan problemas de salud.
La escasez de agua en Las Colinas es un problema recurrente que ha empeorado con el tiempo. Barrera compartió que, a lo largo de cinco años en la zona Este de la capital salteña, la disponibilidad de agua se ha reducido drásticamente, pasando a solo unas horas diarias en sus primeros años. «Este año ha sido el peor año, porque ya desde el verano que venimos mal, Bueno, ahora todo el invierno pasamos sin agua y ahora viene del verano de nuevo y va a ser peor, va a ser peor y es desesperante», lamentó destacando la urgente necesidad de soluciones efectivas y sostenibles para la comunidad afectada.