Se prevé un aumento drástico de las temperaturas en los próximos días, con máximas que alcanzarán los 32°C. Las autoridades advierten sobre el peligro de incendios, especialmente en zonas altas.
La ciudad de Salta se prepara para enfrentar una repentina ola de calor que transformará el clima invernal en un escenario casi veraniego. Según informó el meteorólogo Edgardo Escobar, las temperaturas comenzarán a subir abruptamente a partir de mañana, mientras que la humedad experimentará una caída significativa. Este cambio brusco en las condiciones meteorológicas ha encendido las alarmas entre las autoridades debido al incremento del riesgo de incendios forestales, particularmente en la Puna y las zonas elevadas del Valle de Lerma.
El termómetro, que hoy apenas rozará los 17°C, se disparará hasta alcanzar los 32°C el viernes. Este aumento vertiginoso no solo afectará a las máximas; las mínimas también sufrirán un ascenso considerable, pasando de los actuales 3°C a 10°C en cuestión de días. El meteorólogo hizo un llamado especial a la precaución para el jueves y viernes, señalando que serán «días claves» en cuanto al peligro de incendios, especialmente en las áreas de mayor altitud donde se esperan vientos del sector oeste.
A pesar de que este repunte térmico traerá consigo días más agradables y cielos despejados, los expertos advierten que la situación podría cambiar nuevamente a partir del domingo. Si bien no se prevé un retorno al frío intenso experimentado a principios de julio, Escobar recomienda a la población no apresurarse a guardar la ropa de abrigo. «En agosto, las expectativas psicológicas cambian, y la gente comienza a pensar en temperaturas más agradables», comentó, aunque advirtió sobre la posibilidad de un «colapso del sistema frío» en el futuro cercano.
