Asoma un debate sobre recursos naturales y soberanía. El proyecto se acota a la producción de hidrocarburos y la minería. Buscaría reanimar la actividad desmontando limitaciones cambiarias y dando mayores garantías.
Medios nacionales anuncian que avanza en los despachos próximos al Presidente un proyecto pensado básicamente para la producción de petróleo en Vaca Muerta y la extracción de litio en provincias como Salta. El objetivo del gobierno sería reanimar la actividad y facilitar inversiones a través de liberar esas actividades del cepo o “encapsularlas” legalmente con regímenes propios que garanticen horizonte jurídico y flujo –de llegada y salida- de millones de dólares. La iniciativa no tiene fecha, aunque el Gobierno deja trascender que en una economía fría proyectos de ese tipo son vitales. Los más optimistas ven una luz hacia octubre.
Uno de los casos que disparo la urgencia ocurrió en Salta: el freno al proyecto de 600 millones de dólares encarado por la empresa de capital francés y transnacional Eramet. El anticipo de esa medida empresarial lo tuvo Alberto Fernández hace un mes durante su visita a Francia. La empresa explicó su decisión señalando centralmente las dificultades para financiar el proyecto. Esos problemas son adjudicados, naturalmente, a dos cuadros: el cepo cambiario y la incertidumbre por la renegociación de la deuda y también, sin vueltas, por la indefinición de un programa económico más allá del ajuste de cuentas fiscales decidido.
“En medios oficiales califican el referido caso con el litio es razonable y dicen que la necesidad de resolver un marco legal es imprescindible. La empresa francesa ya avanzó con un cuarto de la inversión prevista, es decir unos 150 millones de dólares, pero requiere garantías legales y de contexto para lograr el financiamiento del resto”, remarcó en su edición de hoy el portal Infoabe.
