Los datos fríos del escrutinio provisorio muestran un triunfo aplastante y que para muchos entendidos son un hito desde el retorno de la democracia en la provincia de Salta.
El primer dato contundente es que en los 23 departamentos de la provincia el actual gobernador se impuso. La suma de todos esos votos explican el 47,52% de los sufragios que le permitieron la reelección. Pero muchos otros datos confirman la hegemonía que logró el mandatario: sus candidatos a intendentes se impusieron en 57 de los 60 municipios. Sólo en Tartagal (Avancemos), Aguas Blancas (frente Salta Avanza con Vos) y Colonia Santa Rosa (Partido de la Victoria) se impusieron candidatos de la oposición.
Los resultados también fueron categóricos en el Senado de la provincia. Allí se renovaban 11 bancas y todas fueron para el oficialismo; mientras en la Cámara baja había en juego 30 bancas y 26 quedaron en manos de candidatos que respondían al gobernador.
Lo mismo ocurrió en la Capital provincial en donde viven más de la mitad de los salteños. El intendente electo, Emiliano Durand, encabezaba uno de los frentes oficialistas y se impuso con el 37%. En el Concejo Deliberante capitalino, por su parte, 15 de los 21 ediles pertenecen al espacio del mandatario.
