Desde la gerencia del San Vicente de Paul explicaron que el transformador que falló tenía 45 años de funcionamiento. Ahora se abastecen con generadores eléctricos a la espera de solucionar el percance.
En un hecho que causó preocupación entre el personal médico y los pacientes, el Hospital San Vicente de Paul de San Ramón de la Nueva Orán se vio afectado por un corte de luz prolongado. La situación, según informó el gerente Fabián Valenzuela, se originó por la explosión de un transformador perteneciente al propio nosocomio, lo que desencadenó la avería del transformador externo de la empresa de electricidad.
Ante esta contingencia, Valenzuela explicó a la prensa que EDESA actuó con prontitud para regularizar el suministro eléctrico, reponiendo sus equipos dañados. Por su parte, la gerencia del hospital se encuentra trabajando para reponer los transformadores que resultaron quemados en el incidente. Según señaló a Nuevo Diario, estiman que el servicio se restablecerá con normalidad en un plazo cercano, mientras que actualmente se están utilizando grupos electrógenos para mantener operativas las áreas críticas.
El corte de energía se produjo alrededor de las 10 de la mañana de este miércoles, y si bien se intentó solventar la situación con los grupos electrógenos, estos también presentaron fallas, agravando la situación de forma temporal. No obstante, Valenzuela aseguró que «en ningún momento se dejó de proveer a los lugares críticos» como el área materno infantil, terapia intensiva, guardias, internación y quirófano.
En cuanto a las causas del incidente, el gerente del Hospital San Vicente de Paul señaló que, según los registros, el transformador averiado data del año 1979, lo que indicaría su obsolescencia tras décadas de uso intensivo. «Yo creo que ya por el tiempo el uso habrá dicho basta, como cualquier maquinaria», expresó Valenzuela, aunque aclaró que los técnicos realizarán un análisis más exhaustivo para determinar los motivos precisos de la explosión.
