El mandatario sigue criticando la decisión del gobierno nacional y sus legisladores de retirar las modificaciones a los Impuestos Internos al Tabaco de la nueva Ley Ómnibus. La medida favorece a Pablo Otero de la tabacalera Sarandí.
La historia comenzó la noche del martes cuando el gobernador salteño emitiera un mensaje en redes sociales criticando al gobierno nacional y a diputados macristas y libertarios por promover el retiro de las modificaciones a los Impuestos Internos al Tabaco del nuevo proyecto de Ley Ómnibus que se discute en comisiones del Congreso.
Un día después el mandatario insistió con su postura en una entrevista a Radio Rivadavia y cargó contra la Tabacalera Sarandí, que produce los cigarrillos Red Point y Kiel y es propiedad de Pablo Otero. El empresario es apodado “El señor del tabaco” y concentra muchas críticas porque desde 2017 no pagan el impuesto interno mínimo. La mecánica que empleó fue una serie de cautelares para no pagar el tributo aduciendo que se trata de una pyme y no de una multinacional, mientras el gobernador de Salta aduce que hace rato que dejó de serla.
Hoy el mandatario volvió a usar las redes sociales para arremeter contra el gobierno. “Nadie se hace cargo de la continuidad del privilegio para el Sr. Tabaco. No fueron los funcionarios del Gobierno, tampoco los diputados del Pro ni de LLA. La mano invisible… (+)
Los gobernadores de provincias tabacaleras solicitamos que se incluya de nuevo en el capítulo fiscal de la “Ley Bases” la regulación del impuesto al tabaco y que se discuta en el Congreso (+)
Así queda claro de quién es la mano, y que den la cara los responsables ante los jubilados, y todos los argentinos de bien que están soportando estoicamente el ajuste, con la esperanza de que se terminen estos privilegios”, finalizó el gobernador salteño.
