Un informe favorable a un country que se construye en la zona de yungas de San Lorenzo fue cuestionado por omitir su categoría de protección del bosque según la ley y de esta manera permitir el avance inmobiliario en una zona prohibida, perjudicando la flora y fauna salteñas.
El polémico peritaje realizado por el Ing. Pablo Campos sobre el impacto de un exclusivo country en construcción en la localidad de San Lorenzo, a escasos kilómetros de Salta Capital, fue impugnado durante una audiencia judicial por graves irregularidades. El profesional había presentado un dictamen de sólo 5 páginas que omitía mencionar que el área, de gran valor ecológico, está protegida como “Zona Amarilla” que prohíbe desmontes y urbanizaciones.
Recordemos que el country Los Maitines se construye prácticamente sobre una reserva de bosque nativo de la región de las Yungas salteñas, hogar de una gran biodiversidad y fuente hídrica. Por ello, un grupo de vecinos de San Lorenzo presentó un amparo ambiental en 2022 y solicitó una medida cautelar para proteger el área. La jueza a cargo ordenó el cese de tala de árboles nativos.
Ante el dictamen del Ing. Campos, que no detallaba impactos negativos ni actos ilegales, los demandantes requirieron una pericia más exhaustiva a especialistas del Instituto Miguel Lillo de Tucumán. El nuevo informe, con metodología científica, confirmó graves afectaciones por desmontes y extracción de árboles protegidos.
En la audiencia judicial los amparistas cuestionaron al Ing. Campos por validar el emprendimiento sin mencionar que viola la Ley 26331 de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos. El profesional eludió las preguntas y no pudo justificar sus conclusiones.
Los demandantes solicitaron a las autoridades universitarias evaluar la conducta del Ing. Campos por posible mal desempeño y deshonestidad intelectual. Consideran inadecuado avalar intereses económicos por sobre la protección ambiental.
El caso ilustra cómo influyentes familias logran autorización para urbanizaciones irregulares, mediante peritajes y estudios sesgados. Los amparistas esperan que se haga cumplir la ley de bosques nativos y se preserve el valor ecológico del área ante nuevos intentos de emprendimientos dañinos.
La situación continúa bajo análisis de la Justicia, mientras crece la indignación ciudadana por la puesta en riesgo de un bosque nativo único en la región, patrimonio natural de los salteños.
Informe verdadero
El «Informe Relevamiento de la biodiversidad en la finca Los Maitines en Salta», realizado por investigadores de la Fundación Miguel Lillo, señala que el área consiste en lomadas con plantaciones de pinos, eucaliptos, nuez pecán y crespones, y en las zonas bajas bosques secundarios dominados por ligustro.
Se relevaron 29 especies vegetales, 24 nativas y 5 exóticas, detalladas en una tabla. Las principales nativas son: ceibo, tipa, pacará, tarco, arrayán, chalchal. En tanto que el bosque secundario brinda servicios ecosistémicos importantes y su composición permite la integración de aves frugívoras con el sereno.
El dato preocupante es que se observó extracción de árboles y tocones en algunos sectores, evidenciando desmontes. Las especies extraídas fueron: sereno, tipa, pacará, tala blanca y negra. Esta alteración del bosque afecta la conectividad biológica, dispersión de semillas y fauna, el ciclo hidrológico y la estabilidad del suelo. Y no es menor señalar que el área se considera una zona de interfase urbano-forestal, por lo que se recomienda preservar el bosque por sus servicios ambientales.
Por último, el informe de la Fundación indica que las actividades del emprendimiento Los Maitines se encuadran en la definición de desmonte, prohibido para bosques de categorías amarilla y roja. Se recomienda un plan de manejo sostenible.
