El presidente pasó por nuestra provincia y cientos de simpatizantes lo recibieron en Capital. Arengó a dar la vuelta a la votación y pidió llevar al “tío cansado” a votar en las generales.
Macri arribó a suelo salteño alrededor de las 17. Primero fue recibido en el aeropuerto por el senador nacional Juan Carlos Romero y su esposa, Carmen Lucía Marcuzzi. también estuvo presente el jefe de Gabinete de la Provincia, Baltasar Saravia. Luego pasaron por El Mollar, localidad de Chicoana, para recorrer la obra en el Núcleo de Inclusión y Desarrollo de Oportunidades (NIDO).
En tanto que en la capital salteña, un par de cientos de personas estaban ya en la zona del monumento al General Güemes, donde se llevaría adelante el acto enmarcado en la gira por distintas provincias con la esperanza de revertir un casi imposible resultado de las PASO de agosto, por lo cual días atrás había protagonizado otra escena digna de convertirse en meme: en Tucumán besó los pies de una mujer que había perdido el zapato durante el acto y la subieron al escenario porque era su cumpleaños. “Mi cenicienta”, dijo el presidente y luego se hizo viral.
El balcón del club 20 estaba engalanado, muchos rostros de tez blanca, señoras grandes con sombreros tipo panameños; hombres con cara de no tener problemas de dinero y los vendedores de banderas argentinas aprovechaban para hacer una moneda con vinchas amarillas que llevaban la inscripción “sí se puede”; mientras otros cuidaban autos. El ambiente lleno de banderas y en el escenario un locutor agitaba al público para que cantaran mientras aseguraba “vamos a luchar hasta el balotage”.
Pasadas las 18.30 ya estaba esperada la llegada del presidente que descendería en el helicóptero en la cancha de Gimnasia y Tiro para luego dirigirse hacia el escenario dispuesto en las cercanías del monumento a Güemes. Antes estuvo en las oficinas del Ministerio de Educación de la Provincia para encontrarse con las docentes finalistas del programa Maestros Argentinos.
Alrededor de las 19.00 subieron los candidatos de Cambiemos en Salta. Gladys Moisés, Martín de los Ríos, Miguel Nanni y Juan Carlos Romero. Miguel Nanni tomó la palabra, recordó la llegada de Alfonsín al mismo monumento donde se esperaba el arribo de Macri. “Hemos venido a acompañar a Mauricio”, aseguró. “Yo soy radical y he venido a decirle al presidente que hay muchos buenos hombres que lo están acompañando. Estoy seguro que Leandro Alem le diría a Mauricio que sí se puede; que donde Hipólito Irigoyen le diría que esta es la causa, que es necesario cambiar el rumbo del país para siempre; Arturo Ilia le diría que no queremos más políticos corruptos que nos saquean. Hoy Mauricio representa la patria y la república, y en Salta le vamos a decir que sí se puede carajo”, finalizó emocionado.
Luego Juan Carlos Romero tomó el micrófono. “Quiero decirles que ustedes también están haciendo acá lo que miles de argentinos a lo ancho y a lo largo. Sí se puede, se puede evitar que vuelva el caos, el desorden y la violencia. El 27 es un día importante y hay dos visiones, concepciones de país y nosotros preferimos quedarnos con esto antes que vuelva el desorden. El kirchnerismo no va a volver”, aseguró el candidato a senador que luego espetó: “El Frente de Todos quiere venir por todo y no lo vamos a dejar. Están amenazando una reforma constitucional para tener jueces adictos, quieren volver para atrás y no los vamos a dejar”. Luego aseguró que defiende la vida y la familia, algo que dijo haber demostrado con su voto en contra del aborto legal seguro y gratuito; esa declaración generó la ovación de los antiderechos que se contaban por cientos en el lugar.
Macri subió al escenario entre gritos de Sí se puede. “Buenas tardes queridos salteños, los amo. Qué lindo estar acá en la cuna de la fiesta del Milagro”, dijo al iniciar su intervención ante los gritos del público. “Los veo y miro la fuerza de la Argentina en todos ustedes, que son una inspiración y nos llenan de fuerza. Les quiero decir gracias porque ese 24 de agosto salieron a la calle a decirme que no estaba solo. Hoy vine a Salta la linda a decirles que ustedes no están solos, miren a su alrededor cuántos somos y cada vez somos más, porque no nos vamos a resignar”, se despachó.
“Nos une cuidar esta democracia, querer vivir en paz, la honestidad, querer construir, respetar al otro y querer dejar un país mejor a nuestros hijos, el no a la impunidad y nos une todo eso porque tiene que ver con nuestro futuro. Estamos unidos más que nunca para defender esos valores. No tengamos miedo porque los voy a defender y no voy a parar aunque llueva, truene o nieve hasta que no consigamos esa Argentina que nos merecemos”.
“Hace tres años y medio decidimos juntos jugarnos por el cambio, dejar de ser parte del problema y ser parte de la solución. Sabemos que desde abril del año pasado no ha sido fácil, y que el mayor pesó cayó sobre ustedes, la clase media. Los escuché, tomé nota, sé lo que es no llegar a fin de mes. Pero todo lo que hemos hecho no ha sido en vano, porque ahora viene el crecimiento, la mejora del salario y el alivio a fin de mes. Esas nos son palabras, están basadas en hechos que todos vimos”, arengó.
Luego el presidente hizo referencia a la situación tecnológica, aseguró que llevaron internet y 4G a distintos lugares de la provincia. También habló del operativo Frontera Norte, con el que aseguró “recuperamos la frontera”. “Quiero que escuchen los jujeños, los tucumanos y hasta los bolivianos, sí se puede dar vuelta esta elección”, cantó Macri junto al “Esto se da vuelta” que largaban los parlantes ubicados al costado del escenario.
“Hay gato para rato” y “Gato querido, el pueblo está contigo”, cantaban en las primeras final, ante la sonrisa del presidente que incluso se sumó a la broma destacando un cartel en que el que la “G” de gracias tenía forma felina.
En cuanto a las elecciones generales, el presidente alentó a fiscalizar y a llevar “al tío cansado que dice para qué voy a votar si este país no se arreglar”. “Esta elección el desafío es que vayamos a votar como nunca en los últimos 30 años”. Luego se despidió pidiendo que todos regresaran a sus casas en orden.
