Empleados de Telecom habían montado una pyme que ofrecía WiFi en Orán. Recaudaban más un millón de pesos mensuales. Una investigación federal terminó con la iniciativa.
Hay en ciertas prácticas delictivas un perfume atractivo. Como una tentación que no nos conviene, algo que la mente nos dice que está mal pero igual nos saca una sonrisa. Lo que ocurrió en Orán podría encajar en esa categoría. Es que la que perdió esta vez fue una empresa gigantesca contra un minúsculo grupo de avivados que por un rato vivieron el sueño eterno de ganarle al grande.
La información pura y dura dirá que en Orán la Justicia desbarató a una banda delictiva que le había robado cables y antenas a Telecom para ofrecer su propio servicio de WiFi. Sus integrantes recaudaban más de un millón de pesos con unos 200 clientes. Ahora están prófugos.
Canal 10 de Orán informó que el miércoles se realizaron allanamientos en distintos barrios de esa ciudad del norte salteño por parte de Gendarmería, a partir de una investigación federal que terminó con la falsa empresa llamada «Wifi Net», nombre que luego fue remplazado por «Orán Conecta».
Salta 12 informó que que la provisión del servicio era realizado con equipamiento sustraído de la empresa Telecom, donde se desempeñaban dos de los cabecillas de la organización.
El sitio agregó que para apoderarse de la señal de la empresa contaban con dos antenas, una para la recepción y otra para la distribución, que instalaron en domicilios que fueron allanados, donde también se hallaron cables y otros equipos de la firma afectada.
