Una testigo reveló que Javier Saavedra fue expulsado de una ONG por un presunto acoso. La defensa presentó seis testigos que lo describieron como una persona comprometida con la comunidad.
La audiencia por el femicidio de Jimena Beatriz Salas se reanudó hoy con la declaración de siete testigos, uno de los cuales aportó datos sobre una conducta previa del acusado Javier Saavedra. La jornada se desarrolló ante el Tribunal integrado por los jueces José Luis Riera, Mónica Faber y Maximiliano Troyano.
Una testigo, que trabajó con Saavedra en Santa Victoria Este entre 2018 y 2019, declaró por videoconferencia. Relató que un incidente de acoso motivó su expulsión de la fundación donde ambos se desempeñaban. La mujer precisó que, al regresar de un viaje, una compañera le contó que Saavedra la había acosado y «había pretendido acostarse con ella».
La coordinadora de la ONG decidió la expulsión de Saavedra tras conocer los hechos. La testigo afirmó que la presunta víctima optó por no radicar denuncia para no perjudicar a la organización. El acusado abandonó la vivienda de la fundación, pero permaneció en la zona, alojándose en un convento.
Posteriormente, la testigo describió dos episodios de inseguridad que sufrió la casa de la ONG tras la partida de Saavedra. En el primero, encontraron el inmueble con las ventanas abiertas e inundado, aunque sin robos. En un segundo hecho, ocurrido en 2019, sí fueron sustraídas maletas y computadoras.
A continuación, declararon seis testigos propuestos por la defensa. Un sacerdote franciscano de la Parroquia San Ignacio de Loyola de Santa Victoria Este dijo que Saavedra se integró a su orden en 2020 como voluntario. Describió sus diversas tareas de ayuda comunitaria y lo consideró una persona de confianza.
El párroco también relató que presenció la detención de Saavedra y que lo siguió hasta Tartagal por preocupación. Mencionó que el acusado recibía la visita de su madre y de su novia durante su estadía en la casa parroquial y que luego lo visitó en prisión.
Otros testigos de la defensa, excompañeros de Saavedra en la universidad y en proyectos sociales en el barrio Floresta, ofrecieron un concepto positivo de su persona. Lo describieron como un buen compañero, participativo y tranquilo, sin señalar aspectos negativos en su conducta.
Según la información compartida por la prensa del Poder Judicial, el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta este martes a las 8.30. Se espera la comparecencia de más testigos citados por la defensa en las próximas horas.
Los hermanos Adrián Guillermo y Carlos Damián Saavedra están siendo juzgados por el delito de femicidio con agravantes de alevosía y premeditación, entre otros. La fiscalía está representada por Mónica Poma, Gabriel González y Leandro Flores, mientras que la defensa y la querella están a cargo de los letrados Marcelo y Pedro Arancibia, respectivamente.
