Tras el cambio de dueños, trabajadores dieron a conocer las actuales condiciones en el ingenio de Campo Santo. No hubo reincorporación total de los despedidos, tampoco pago de indemnizaciones, entre otras.
En un comunicado, desde el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar San Isidro (SOEASI), dejaron en claro que el cambio de administración -tras las amenazas de cierre definitivo y varios meses de negociaciones, marchas y huelgas- no está cumpliendo con lo esperado por los 730 trabajadores que la multinacional Gloria dejó prácticamente en la calle.
Lo dice claramente el comunicado, que ni siquiera la llegada de los nuevos y actuales dueños sirvió para impedir la catástrofe social desatada por la acción de las patronales y la inacción cómplice de los funcionarios de gobierno.
Entre los problemas mencionados está que la nueva administración trajo empleados de otras provincias discriminando a los trabajadores locales con antigüedad, redujeron salarios y derechos con vigencia legal, estigmatizaron a delegados y a la totalidad de la comisión directiva del SOAESI, no reteniendo el aporte sindical ni depositando como marca la ley esas cuotas, incumpliendo los horarios laborales legales y presionando a todos aquellos que se atrevieran a expresar cualquier reclamo.
“El grupo empresario tucumano que aparentemente compró la empresa, ingresó en el escenario con una política de explotación digna del siglo XIX, desconociendo los derechos históricamente adquiridos de todos los trabajadores del ingenio San Isidro e intentando destruir a la organización sindical que los representa, el SOEASI”, dice textualmente el comunicado.
Mariano Cuenca, secretario general del SOEASI, dijo al respecto que “todo esto fue el preludio de la llamada reforma laboral que el gobierno nacional pretende instalar en todo el país, aunque en Salta, dada la mentalidad feudal de ciertos empresarios, fueron más allá incluso de las pretensiones de Mauricio Macri y Jorge Triaca, con la participación del gobernador Urtubey que parece tener un proyecto político y económico idéntico al del presidente y sus funcionarios”.
El dirigente azucarero agregó que “ni siquiera han pagado el 50 por ciento de las indemnizaciones que debían hacerse efectivas tras el tendal que dejó el Grupo Gloria en enero de 2018. Y ni hablar de los susidios interzafra cuyos montos y tiempos de recepción debían ser actualizados al igual que el fondo de desempleo”.
