La Provincia había dispuesto refacciones en el hogar donde vivían tres mujeres y catorce hombres. Los trasladó a un lugar sin privacidad ni con espacios acordes a los problemas de su edad.
La jueza Catalina Gallo Puló hizo lugar a una acción de amparo presentada por los abogados David Arnaldo Leiva y Sergio Francisco Guerrero, en representación de las personas mayores alojadas en condiciones indignas en un centro vecinal de la ciudad de Orán. El gobierno provincial debe garantizar el traslado de las personas mayores a un inmueble en condiciones, mientras la Municipalidad tiene la obligación de controlar y colaborar con el mismo.
«No es un centro de salud, no tiene las condiciones adecuadas de las normas de bioseguridad y salud que determinan para la atención de personas viejas y enfermas», argumentaron los abogados en el escrito. Leiva, por su parte, confeso que conoció la situación en la que vivían los ancianos casi de casualidad: cuando fue a visitar a su amigo personal D. D. al lugar y lo encontró acostado en una cama separada de otra por apenas “15 o 20 centímetros». En la demanda, Leiva relató que al principio le querían impedir el ingreso, pero que él ingreso igual y constató la situación.
Las 17 personas mayores habitaban el Hogar San Vicente de Paul y fueron trasladadas al Centro Vecinal 17 de Agosto hasta que supuestamente concluyan los trabajos de refacción edilicia del Hogar. En el centro vecinal, mientras tanto, las condiciones de vida eran degradantes: hacinamiento, falta de privacidad, carencias básicas en materia sanitaria, de higiene y también de habitabilidad denunciaron los abogados en el escrito.
La jueza Catalina Gallo Puló fue al lugar y constató las condiciones en que se encontraban las personas mayores. Tras ello hizo lugar al amparo y ordenó que el gobierno provincial reubique a los ancianos en un inmueble adecuado en tanto “es responsabilidad del Estado de asegurar una vejez digna” destacó. «Si bien la encargada manifestó que estaba a la espera de un biombo, tal como indican los amparistas, todos los residentes compartían el mismo espacio para dormir, cambiarse, asearse. Incluso, en ese momento algunos estaban almorzando sentados en sus camas», describió la magistrada.
El gobierno de la provincia – a través de la Secretaria de Personas Mayores – deberá trasladar a los adultos mayores a un inmueble ubicado entre las calles Moreno y Sarmiento de la ciudad de Orán en un plazo de 10 días. Allí deberán permanecer hasta que finalicen las obras de refacción del Hogar San Vicente de Paul. Mientras se espera el traslado, el gobierno debe garantizar condiciones mínimas dignas de habitabilidad de los residentes: pintura que cubra la humedad de la cocina y las habitaciones; cerramiento de las galerías; colocación de ventiladores y/o aires acondicionados en las habitaciones; acondicionamiento de la galería de la planta baja como comedor y la de planta alta para recreación; colocación de un horno y anafes en cocina; también de un televisor en alguna zona común.
