El edil de La Cámpora trabajará para que “Salta no quede afuera de la Argentina que se viene” y consideró que Sáenz y Romero deberán alinearse con la Casa Rosada. También adelantó que no apoyará el impuestazo del 50% en el municipio.
El concejal por el Frente de Todos, que debuta como legislador con su escaño en la banca municipal, señaló tras asumir que “no hay nada que festejar porque hay mucho trabajo por hacer, venimos de un gobierno que nos ha tratado muy mal, tanto acá en Salta como a nivel nacional. Y lo digo por los postergados, que son los que más padecen esta crisis”.
Frente a la elección módica del peronismo progresista local, Ruarte confesó que “la verdad que no me lo esperaba, pero tuvimos errores y no hay que ocultarlos, hay que ver qué es lo que pasa. Y además luchábamos contra dos aparatos muy grandes”.
“No quiero que Salta quede ajena a la Argentina próspera que se viene, no quiero que esté relegada, por eso quiero que Gustavo Sáenz y Bettina Romero se alineen también”, planteó el concejal recientemente asumido y destacó que “no va a ser fácil salir de esta crisis, la deuda que nos dejan [Cambiemos] es muy grande”.
En cuanto a la construcción venidera del progresismo salteño, Ruarte indicó que “hay que trabajar mucho más sobretodo en la capital, para representar a muchos que han quedado huérfanos. Hay mucha gente que ha quedado descontenta, que no apuesta a todo lo que está pasando en Salta”.
Sobre sus prioridades como edil, enumeró que “hay que luchar por la emergencia alimentaria que hay, porque no se está implementando, hay que hacer que llegue la ayuda a quienes realmente lo necesitan” y acotó que también trabajará por los adultos mayores y por los niños.
Adelantó que será responsable como opositor, pero remarcó que no acompañará el aumento de la Unidad Tributaria que se está pidiendo, que asciende a más del 50%. “Es mucho lo que están pidiendo”, sentenció Ruarte.
