Intentaron frenar el cierre de los CEIJA y terminaron en el banquillo. Los imputados denunciaron que se trata de una causa armada por el gobernador Morales.
En el feudo de Gerardo Morales, gobernador de Jujuy, los reclamos de la sociedad contra el ajuste terminan en la vía judicial. Eso le ocurrió a cuatro estudiantes y un docente que protestaron por el cierre de los Centros de Estudio Integral de Jóvenes Adultos (CEIJA).
Los testigos e imputados ya comenzaron a dar testimonio ante el Tribunal Contravencional 1. Allí denunciaron que se trata de una operación comandada por el radical Morales. La causa, a cargo de los jueces que encarcelaron a Milagro Sala, terminaría la semana próxima.
Una docente de Trabajo Social de la UniversidadNacional de Jujuy, Valeria Chacón, declaró sobre Valentina Melo, una de las estudiantes imputadas. “Salieron a defender el derecho a recibirse, ignorado por el Gobierno que los persigue”, señaló Chacón.
“Estudiantes y docentes fueron puestos en el banquillo de los acusados solamente por defender su derecho a terminar el estudio secundario, en la provincia donde seis de cada diez estudiantes no llega a concluir ese nivel”, apuntó un grupo de estudiantes, trabajadores y organismos de derechos humanos convocados en las puertas del tribunal.
La comunidad educativa acompañó el juicio manifestando su preocupación por la persecución desatada en el norte contra la protesta social.
