Los incendios incesantes en el vertedero del Consorcio del Valle Calchaquí en Animaná mantienen en alerta a los habitantes de la zona. Ante la preocupante situación, concejales cafayateños han declarado emergencia ambiental. Además, se revelan preocupantes números de un consorcio que no funciona como debería.
El presidente del Concejo Deliberante de Cafayate, Rodrigo Chocobar, expuso su inquietud frente al colapso del vertedero y subrayó que los concejales han resuelto declarar emergencia ambiental y de salud para que se tomen medidas respecto a la problemática. Chocobar describió la situación como «crítica» y advirtió que no espera mejoras en los próximos meses de gestión del intendente Almeda.
La situación financiera del consorcio también genera preocupación, ya que los aportes actuales de los municipios no son suficientes, según el concejal. Chocobar desmintió la llegada de fondos anunciados por el jefe comunal de Animaná y señaló la necesidad de soluciones efectivas para el tratamiento de residuos y la revisión de la situación del consorcio.
A pesar de la última reunión con autoridades provinciales de ambiente en Cafayate, aún se desconoce si se han girado fondos como paliativo. Además de las pérdidas materiales, preocupa la generación de gases tóxicos y la contaminación debido a la combustión de basura, un problema que ha persistido durante años en la zona.
La falta de respuestas efectivas compromete a los municipios de San Carlos, Animaná y Cafayate. El consorcio, creado en 2013 para el tratamiento de pasivos, no ha cumplido con su función. A pesar de los numerosos pedidos de informe, la situación sigue sin resolverse y los incendios persisten, afectando gravemente el ambiente y la salud de los habitantes de la zona.
