Aunque los montos del arancel varían, los ministros de salud de ambas provincias argumentan como ya lo hiciera Gustavo Sáenz en Salta: que el ajuste ejecutado por el gobierno de Milei los desliza a tomar la medida.
«Se le va a cobrar un 50 por ciento más de lo que es el nomenclador del hospital a todo aquel que venga del extranjero porque realmente es insostenible.» Con esas palabras, el ministro de Salud de Santa Cruz, Ariel Varela, confirmó que su provincia comenzará a cobrar el servicio de salud público a los extranjeros no residentes. Lo atribuyó al recorte de fondos por parte de nación y aseguró que el objetivo es «garantizar la solvencia del sistema». Varela aclaró que los extranjeros residentes en la provincia no serán alcanzados por la medida.
“De esta manera, Santa Cruz, se suma a la medida aplicada por el gobierno salteño en el norte del país. El gobernador Sáenz avanzó en febrero en el arancelamiento para extranjeros no residentes y residentes transitorio o precario por los mismos motivos de alcance nacional” destacan los medios nacionales y recuerdan que el mandatario salteño declaro oportunamente que el recorte de las transferencias nacionales y la disminución de la recaudación producida por la propia crisis económica lo desliaron a adoptar la medida.
Otra provincia que busca sumarse a la decisión de arancerlar la atención para los extranjeros es Corrientes. En la provincial del Litoral, el diputado de Corrientes por el Partido Autonomista José Antonio Romero Brisco presentó un proyecto de Ley en la Cámara Baja provincial para comenzar a cobrar la atención médica, que alcanzaría a las categorías de ‘residentes transitorios’ o ‘residentes precarios’.
