El presidente del Comité para la Prevención de la Tortura brindó detalles de lo que ocurre en el lugar y pidió soluciones y respeto de derechos de las internas.
Parecen escenas de una película, pero son la pura realidad que se vive en nuestra ciudad. La cárcel de mujeres de Salta tiene celdas de aislamiento donde van a parar las internas. Allí son castigadas y maltratadas. Además, en el lugar hay falta de higiene, de buena alimentación y de atención médica. Ni Hollywood podría hacerlo tan bien.
A la información no la brindó ninguna fuente anónima, sino que la dijo el presidente del Comité para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles de Salta, Rodrigo Solá.
El funcionario señaló que la información surgió tras un monitoreo a la Unidad Carcelaria N° 4 de Mujeres de Salta. Dijo que es necesario erradicar las celdas de castigo y la revisión del régimen disciplinario.
«Comprobamos que existen dos celdas de aislamiento», dijo Solá. Detalló que las mismas «no tienen condiciones dignas, miden 1,5 metros por 1,5, no tienen ventilación y ni iluminación propia».
En FM Aries, el funcionario agregó que ya se realizó el pedido para que cese la forma de castigo en tales condiciones y se busque otro tipo de sanciones.
Solá dijo que no hay datos del último año de tratos dignos y que hay internas que estuvieron más de 300 días en ese tipo de celdas.
El funcionario también dijo que se percibió falta de higiene y de alimentación adecuada, retardo en la provisión de medicamentos, escasez de atenciones médicas, odontológicas, psicológicas, psiquiatras, y escasos recursos que se le provee al servicio penitenciario y falta de acceso a tutela judicial. Consideró necesaria una mejora de presupuesto para garantizar las condiciones.
