Se trata de José Derman, integrante del Centro Cultural Rittenhouse, agrupación que se autodefine como «un espacio de carácter anti-comunista».
Derman fue detenido a partir de la investigación de la Dirección de Contraterrorismo de la Policía bonaerense, quien accedió a un video donde el hombre convocaba a tomar las armas “para arrancar de raíz al marxismo”, al mismo tiempo que apuntó contra el actual Gobierno.
En este marco, el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 3 de La Plata, dispuso tres allanamientos en la capital bonaerense, en uno de los cuales se detuvo a Derman por «intimidación pública”.
Según se conoció, en los allanamientos fueron secuestraron: un proyectil de mortero de 83 mm, una Netbook, 3 CPU, un dron con control remoto, 3 celulares, 2 pendrives y 2 handys. Fuentes judiciales confirmaron que el proyectil de mortero será detonado en el Ceamse de la localidad de La Plata .
Derman integra una agrupación que montó un local en la capital bonaerense cuyos fundadores e integrantes promueven públicamente discursos de odio, intolerancia y negacionismo.
El espacio abraza la figura de Kyle Rittenhouse, un joven de Illinois, Estados Unidos, quien con un rifle semiautomático asesinó a dos personas en el marco de las protestas contra la brutalidad policial en 2020 y, además, promociona las tendencias negacionistas en torno al genocidio producido en la última dictadura cívico-militar y emplean en el local insignias neo-nazis.
Así, desde sus redes sociales, en apariciones públicas o mediante videos y textos, hacen referencia al 24 de marzo como «el Día de Lucha contra la Subversión» o afirman mediante pintadas en la ciudad que las víctimas del genocidio no fueron 30.000.
A la vez, en muchos de sus comunicados se refieren a las personas detenidas-desaparecidas como «terroristas», reflotan en sus redes la teoría de los «dos demonios», «la guerra sucia» y «la amenaza subversiva» y también se comparten materiales de reivindicación a represores militares.
Desde el espacio, además, dañaron y pintaron murales platenses por la Memoria, Verdad y Justicia con expresiones como «Muerte» sobre rostros de Madres de Plaza de Mayo o escribieron «Zurdos comunistas» sobre el mural-homenaje al histórico dirigente del Partido Comunista Revolucionario (PCR) Otto Vargas.
Al mismo tiempo, el CCKR se presenta a sí mismo en sus redes como «un espacio cultural-político de carácter anticomunista y antiideología de género»; reivindica la lucha contra lo que denominan una «coalición femimarxista».
Además, la entidad hace referencia acerca de una supuesta crisis de los «valores occidentales y cristianos», que señala a la visibilidad de minorías y al avance en políticas de derechos humanos como los culpables del declive de la civilización.
Fuente: Télam