En su columna de género, realizada en el programa Cuarto Oscuro (FM La Cuerda 104.5), la abogada se detuvo a analizar el avance en la consagración de derechos tras aprobación de esta ley en su momento muy cuestionada por los sectores conservadores.
Se cumplió un nuevo aniversario de la aprobación de la ley de matrimonio igualitario en Argentina. Al respecto la abogada Laura Postiglione, en los minutos de su columna radial de género, hizo algunas consideraciones.
“Estamos a 10 años de una ley que marcó un hito en la historia argentina; un hito a favor del reconocimiento de derechos y se dice que esta ley tuvo un efecto educativo más allá de la consagración puntual de derechos, tuvo un poder simbólico muy importante y después trajo aparejados distintos cambios legislativos”, sostuvo Postiglione.
Además, la abogada comentó: “La ley de matrimonio igualitario fue producto de luchas durante muchísimos años por parte de distintos sectores, colectivos, la sociedad civil, el sector político. Hubo distintas estrategias para lograr esta ley, hubo amparos, muchas parejas tuvieron que ir a la justicia para que se les reconociera el derecho a casarse”.
Rememorando los debates con sectores conservadores en torno a la legalización del matrimonio igualitario, destacó que “con el discurso del miedo y algunas cuestiones hasta ridículas se llegó a hablar de que esto iba a promover la poligamia, el adulterio, que se iba a legalizar todo, que se venía el fin de la familia y todos estos discursos han quedado sepultados, aunque hay sectores que todavía los sostienen”
Postiglione consideró que, tras una década de matrimonio igualitario, toda una nueva generación ya incorporó estas cuestiones relacionadas a la igualdad de derechos. “El poder simbólico que tuvo esta ley en cuanto a abrir un camino hacia una mayor igualdad fue impresionante”, señaló.
“En lo que respecta a las leyes vinculadas a la diversidad sexual, esta es una de las primeras, que tuvo en el 2012 otro hito importante con la ley de identidad de género”, recordó la letrada, a la vez que detalló que Argentina fue el décimo país en el mundo en dictar una norma de estas características y el primero en Latinoamérica.
Antes de finalizar, Postiglione comentó que, si bien este fue un gran paso, “faltan derechos por conquistar, hablamos de la exclusión de las personas trans, de la necesidad de la legalización del aborto”