La causa tiene como imputados a dos miembros de la División Caminera. El hecho tuvo lugar en 2018, sobre ruta provincial 36.
Un nuevo caso de policías salteños que irán a juicio. Así lo requirió la fiscal penal de Derechos Humanos, Verónica Simesen de Bielke. Así como en semanas anteriores, otros uniformados fueron informados sobre el mismo destino.
Esta vez se trata de dos uniformados pertenecientes a la policía caminera. Son el sargento ayudante Julio César Carrizo (43) y el agente ayudante Israel José Escalante (25). Se les acusa del delito de vejaciones calificadas con lesiones leves.
El hecho en cuestión tuvo lugar en septiembre de 2018. Entonces Escalante y Carrizo circulaban en el móvil policial 1608 por la ruta provincial 36, a la altura del kilómetro 4. Ahí detuvieron a un camión Chevrolet que transportaba áridos rumbo a Rosario de Lerma.
Cuando se detuvo el camión los uniformados procedieron a labrar un acta porque el chofer no contaba con el permiso para transportar áridos. Luego pasó otro camión que, en una igual situación, no fue detenido. El chofer inquirió a los policías sobre por qué a él le labraban un acta y al otro camionero no. Eso desató la ira de los uniformados. Uno arremetió contra el chofer y le propinó un golpe en la cara, el agredido intentó defenderse pero fue en vano. Lo patearon en el piso como a un perro para luego reducirlo con una llave que le cortó la respiración.
“Durante el episodio, llegó otro móvil policial de la Comisaría de Campo Quijano, con una mujer policía que les dijo a los agresores que pararan la golpiza”, señala la web del Ministerio Público Fiscal de Salta.
Qué dice la Fiscalía de DDHH
Entre los elementos obtenidos en la investigación, la fiscal penal Verónica Simesen de Bielke, valoró la denuncia del damnificado y las declaraciones de testigos; además de los certificados médicos; el informe de relevancia, la copia del libro de guardia y la copia de la filmación, entre otros, que dieron cuenta de la participación punible de los imputados en los hechos expuestos.
Producto de la golpiza recibida, el chofer del camión Chevrolet sufrió una quebradura con desviación del tabique nasal y numerosas excoriaciones y contusiones. Todas corroboradas por exámenes médicos.