Luego de más de 17 horas atrapados en un corte de ruta en el vecino país, un contingente de 700 personas tenía como destino la festividad de la Virgen de Urkupiña finalmente regresó a la Argentina, gracias a gestiones realizadas por el Gobierno de Salta a través de la Representación de Relaciones Internacionales.
El regreso de más de 700 salteños que quedaron varados en Bolivia después de celebrar la Virgen de Urkupiña se logró gracias a la acción decidida del Gobierno de Salta. Tras establecer contacto con las autoridades bolivianas, se consiguió la reapertura del camino por un lapso de dos horas, lo que permitió que los colectivos, que llevaban a los argentinos, pudieran reanudar su viaje de regreso.
Los colectivos, que transportaban a los festejantes de la Virgen de Urkupiña, quedaron bloqueados por un corte de ruta en Bella Vista, a cien kilómetros de Santa Cruz. La coordinación de la Representación de Relaciones Internacionales, a cargo de Federico Ríos, trabajó en conjunto con la Embajada Argentina en Bolivia y las autoridades locales para resolver la situación.
A pesar de la negativa del Gobierno boliviano para realizar un despeje forzoso de la ruta, el diálogo se convirtió en la clave para resolver la crisis, informó la prensa salteña. La solicitud de reapertura del corte de ruta a través de un cuarto intermedio fue acogida exitosamente, lo que permitió que los viajeros varados pudieran finalmente regresar a casa.
