El mismo constaría de paneles, una bomba y un controlador. Su uso se extiende cada vez más y será una alternativa en los lugares donde no hay corriente eléctrica.
En los días pasados, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) presentó este sistema. Franklin Godoy, miembro del Instituto, comentó por Radio Nacional cuáles serían los beneficios del uso de este sistema de energía renovable para la extracción de agua subterránea que se ha expandido a no sólo los pequeños productores, sino también a los grandes. En cuanto al uso domiciliario, planteó que “hoy en día al tener una energía tan cara, es necesario ver cómo hacemos para reducir esos costos”.
Este sistema consta de un kit compuesto por paneles fotovoltáicos, un controlador, la bomba. “Cuando la energía incide en esos paneles, la convierte en una energía continua, llega al controlador y acciona la bomba para extraer el agua”. Este sistema requeriría un mínimo y casi nulo mantenimiento, además estiman que el tiempo de vida útil es de 25 a 30 años.
La idea es que el agua se almacene en tanques, porque evidentemente, este sistema depende de las horas de sol que se tengan disponibles donde sea instalado. Además indicaron que la amortización del costo de estos equipos se realiza en un par de años.