Gustavo Sáenz no cumplió el código de vestimenta sugerido por el gobierno libertario para el acto que se realizó anoche en Tucumán. No fue el único.
Torazo en rodeo ajeno, o en vestidor ajeno, Gustavo Sáenz no cumplió con el código de vestimenta sugerido por el gobierno de Javier Milei para el acto de anoche en Tucumán, donde el salteño, junto al presidente y 17 mandatarios provinciales firmaron el Pacto de Mayo.
El «dress code» impuesto por la gestión de La Libertad Avanza era de color negro. Sin embargo, el gobernador de Salta combinó su traje con un tradicional poncho que rompió con los códigos esperados por los organizadores.
«¿El poncho se lo va a sacar para la foto? El código era de negro», le dijo un movilero del canal TN a Sáenz, antes de la reunión. El gobernador no dudó con su respuesta: «A mí nadie me dice cómo vengo».
El salteño explicó que su vestimenta implicaba llevar a Martín Miguel de Güemes «siempre» en «el corazón». «Con el poncho salteño que significa la sangre que dejaron nuestros gauchos para que hoy día los argentinos puedan estar en libertad», agregó.
Sin embargo, Sáenz no fue el único que rompió el dress code. Hasta Karina Milei desobedeció al usar un rojo furioso que contrastaba con la mayoría de los gobernadores. El santafesino Maximiliano Pullaro eligió un tono gris. El porteño Jorge Macri, el azul.
