jueves 28 de marzo de 2024
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Una de García Márquez en Salta: la clínica de alta complejidad con fondos venezolanos que prometió un sujeto que secuestraba adolescentes

Ocurrió hace un año, en Aguaray. El hombre tenía nombre falso y mentía sobre su trabajo en un banco de Venezuela. Hoy será imputado. En el caso también está involucrado el ex intendente Jorge Enrique Prado.

Este martes, el fiscal penal de Salvador Mazza, Armando Cazón, imputará al ex intendente de Aguaray, Jorge Enrique Prado, y el venezolano Wuisthon Antonio Díaz Solano, por estafas agravadas y adulteración de instrumentos públicos y privados. Para decirlo sin vueltas jurídicas: por prometer una clínica de alta complejidad en esa localidad, asegurar que se venía una ola de trabajo para la gente del lugar y un progreso inevitable que sería financiado por un banco internacional. En pocas palabras, por mentir en todo.

Todo ocurrió hace poco más de un año, a comienzos de octubre de 2020, cuando Prado ya estaba a un paso de la destitución por el caso del robo de caños del Gasoducto del NEA. El primer fin de semana de ese mes, el ahora ex intendente presentó a Díaz Solano, que por entonces se hacía llamar Dr. Sebastián Solano Guzamana, y decía que era representante de Banesco, una banca venezolana que sería la encargada de la inversión de la clínica.

En una charla realizada el domingo 4 de octubre, «el doctor Solano» dijo que la obra daría trabajo a 200 personas y beneficiaría indirectamente «a casi toda la población de Aguaray». Adelantó que la clínica sería de nivel 3 y tendría un plantel de por lo menos 350 personas, con ocho pisos y un costo de 50 millones de dólares. Aseguró que estaba todo dado para que una sucursal de Banesco se instalara en Aguaray.

Era todo mentira, por supuesto. Lo que no se sabe todavía es si fue una jugada desesperada de Prado ante la inminente destitución o si fue embaucado por Díaz Solano, que luego de esta charla fue descubierto en su mentira y, para colmo, también en turbios antecedentes penales.

El diario El Tribuno y FM Alba informaron que tras la charla en Aguaray, Banesco negó cualquier vinculación con el supuesto doctor y negó cualquier aporte de fondos para una clínica. Esto generó que el fiscal Cazón actuara de oficio. Allí se decubrió la verdadera identidad de Solano. También se supo que secuestró a una adolescente de Aguaray y la llevó cautiva a Bolivia. Solano se encuentra detenido en Tartagal por ese episodio.

 

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