Es señalado como la persona que impide el ingreso de la intendenta a Juntos por el Cambio. Promueve la candidatura a gobernador de Miguel Nanni y es uno de los operadores que el Jefe de Gobierno de CABA tiene en las provincias. Hasta marzo del año pasado estuvo imputado en la causa «Ruta del dinero K».
El PRO Salta continúa intervenido y tiene nuevas autoridades. Se trata de Alejandro Vila Gallo y Antonio Demarco, dirigentes porteños designados por Patricia Bullrich.
Vila Gallo y Demarco reemplazarán a Martín Pugliese, quien hasta esta semana se desempeñaba en el cargo. FM Profesional informó que Pugliese había llegado luego de la renuncia de Gustavo André, hace aproximadamente un año.
La emisora informó que las elecciones provinciales, las negociaciones con partidos para armar los frentes electorales y las posibles candidaturas fueron las causas de molestia por parte de algunos dirigentes, que se quejaron ante Bullrich, quien decidió reemplazar al interventor. Los nuevos interventores tendrán como objetivo unir al partido y consolidar las decisiones electorales que tomen los salteños.
Demarco, un operador silencioso
Demarco no es alguien desconocido para la política salteña. El mes pasado, CUARTO lo describía como un operador político al servicio de Horacio Rodríguez Larreta. «Una figura que a veces despierta la curiosidad de la prensa metropolitana. Estuvo imputado hasta marzo del 2022 en la causa denominada ‘Ruta del dinero K’, que tenía al empresario Lázaro Báez como villano principal», agregaba este medio.
Por esa imputación, Mauricio Macri lo habría desplazado en 2013 de un cargo que Demarco ocupaba en CABA, aunque meses después fue reciclado. Horacio Rodríguez Larreta tampoco prescindió del hombre que, como Subsecretario de Hábitat e Inclusión, alcanzó notoriedad por adquirir un inodoro de 405 mil pesos, una lámpara de 32 mil pesos, cifra que también usó para comprar un martillo. El área de Demarco fue absorbida por otra en 2019, pero las noticias volvieron a mencionarlo en 2021 como parte del equipo encargado de instalar la candidatura presidencial de Rodríguez Larreta por fuera del AMBA. Se hacen llamar los “facilitadores”, un concepto que busca reemplazar al desprestigiado “operador” aunque la función que cumplen es similar: subordinar todo a los intereses políticos y electorales del jefe al que sirven. Los “facilitadores” suelen cultivar un bajo perfil y en muchos casos provienen del peronismo. Entre ellos estaba Maxi Corach, el hijo del principal operador de Carlos Menem.
Quienes dicen conocer el periplo de los amarillos salteños, remarcan que las directivas de Demarco colisionan con los planteos locales. Demarco es señalado como la persona que obtura el ingreso de Bettina Romero a Juntos por el Cambio y promueve la candidatura a gobernador del radical Miguel Nanni. Todo enmarcado en un razonamiento que convierte a los comicios salteños en herramienta táctica de una estrategia nacional que las figuras provinciales deberían acatar aun cuando no conozcan los detalles de la misma.
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