Lo decretó el gobernador pampeano para su provincia en base a una normativa nacional de diciembre de 2020. Es alto el porcentaje de uniformados involucrados en femicidios.
El Gobierno de La Pampa decretó que los agentes policiales denunciados por violencia de género entreguen de manera inmediata su arma reglamentaria. La decisión se alínea con lo dispuesto por el Gobierno nacional el pasado diciembre, a través de la resolución 471/2020. En la misma, se dispuso la restricción de portación de arma para los agentes policiales denunciados por violencia de género o intrafamiliar.
A partir del decreto, se dispone también que los policías deberán entregar el arma “cuando revistan en situación de pasiva, sin distinción de causa o motivo y encuadre legal de la misma; cuando revistan en disponibilidad a excepción del supuesto previsto en el inciso 1) del artículo 119 de la Norma Jurídica de facto Nº 1034/80; y en caso de existir afecciones psicológicas y/o psiquiátricas previa certificación emitida por profesional competente”, resaltó la agencia informativa Telam.
El decreto nacional considera “que para reducir la prevalencia de la violencia de género e intrafamiliar en las instituciones de seguridad, es preciso potenciar las capacidades institucionales para facilitar las acciones que pueden prevenir la escalada de violencia una vez que ya se detectaron antecedentes en algún integrante de las FUERZAS POLICIALES Y DE SEGURIDAD FEDERALES”.
