Una veintena de personas de las comunidades Misión Salim II y Misión Carboncito llegaron ayer a la ciudad para gestionar soluciones ante las autoridades de la provincia.
Las dos comunidades están dentro del municipio de Embarcación y Adelina Montes de la comunidad Misión Salim II es una de las voceras del grupo. Ayer dijo que vinieron para “poder conocer a los funcionarios». «Estamos sufriendo bastante, no tenemos la posibilidad de tener las cosas, por ejemplo, de salud, de educación, de un buen techo», declaró a la sección local del diario Página 12.
La veintena de personas, entre adultos y niños y niñas, pasó el domingo al lado de la estación del Teleférico, donde el Foro de Mujeres por la Igualdad de Oportunidades les asistió. La vocera detalló que trajeron notas que pretenden presentar hoy al gobierno. «Queremos hablar con el ministro de Educación, como el ministro de Salud, con todos los ministros, queremos dialogar con ellos, porque la verdad que presentamos notas y notas y nunca hay respuesta para nosotros», agregó Montes.
Al Ministerio de Educación le plantean que haya maestros bilingües en la escuela de la Comunidad wichí Padre Lozano, a la que concurren niños y niñas de Misión Salim. En cuanto a la atención de la salud, contó que en la salita de Padre Lozano, no cuentan con un enfermero permanente y que los “médicos que atienden ahí son de Embarcación y cuando quieren van y cuando no quieren, no van. El otro reclamo tiene que ver con la necesidad de contar con viviendas adecuadas y no con los refugios que habitan a los Montes describió como algo de madera, barro y plásticos.
En Misión Salim II residen unas 120 familias y como casi todas las comunidades del lugar producen carbón, confeccionan artesanías y trabajan en fincas. Es la vía para reunir algo de dinero, pero no alcanza, resaltó Montes. Misión Carboncito, por su parte, centra su reclamo en la puesta en marcha de un merendero para atender en parte las necesidades de niñas y niñas de esa Comunidad.
